Carelia es un área geográfica repartida entre Finlandia (regiones de Carelia del Norte y Carelia del Sur) y Rusia (República de Carelia (donde se encuentra, con mucha diferencia, la mayor parte de esta patria) y Oblast de Leningrado). Es una de las tierras más disputadas de todo el mundo. Algo así como la Cachemira europea.
Su historia es un continuo mover de fronteras. Suecia y la República de Nóvgorod lucharon por Carelia y por Ingria en el siglo XIII. El Tratado de Nöteborg en 1323 dividió Carelia entre las dos potencias. En el Tratado de Stolbovo de 1617 Suecia se hizo con la mayor parte de la Carelia rusa y miles de carelianos emigraron a Rusia.
El Tratado de Nystad de 1721 entre Rusia y Suecia concedió la mayor parte de Carelia a Rusia. En la Guerra de los Sombreros (1741-1743) los rusos se hicieron con casi toda Carelia. Tras la Guerra de Finlandia (1808-1809), Rusia le arrebató a Suecia Finlandia y luego incorporó la Carelia a Finlandia, que era territorio ruso.
En 1917 Finlandia se independizó de Rusia y la frontera se confirmó mediante el Tratado de Tartu de 1920. Tras el final de la Guerra Civil Rusa (1917-1923) y el establecimiento de la Unión Soviética en 1922, la Carelia oriental se convirtió en la República Autónoma Carelia en 1923 dentro de Rusia, que era parte de la Unión Soviética.
Tras la Guerra de Invierno (1939-1940), la Unión Soviética se anexionó casi toda la Carelia finesa. 400.000 huyeron. Finlandia recuperó la Carelia rusa por tres años (1941-1944) en la Guerra de Continuación. Al acabar la Segunda Guerra Mundial en 1945, casi toda Carelia era soviética. Desde 1991 es de la Federación Rusa.
Políticamente hablando los carelianos son rusos y culturalmente fineses. De hecho, el idioma careliano es similar al finés. Además de los dos citados, hablan también ruso y sueco. Moscú y Helsinki se lo disputan pero al pueblo careliano le haría feliz reunificar sus tierras y gozar de un estado independiente donde vivir en paz.
Comentarios recientes