¿Sabías que la crisis inmobiliaria española tuvo su pistoletazo de salida en el Reino de Valencia?

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La actual crisis económica de España, provocada por el pinchazo de la burbuja inmobiliaria, tuvo su pistoletazo de salida en tierras valencianas. Sería faltar a la verdad si dijéramos que la crisis ha nacido o ha sido provocada en el Reino de Valencia, ya que la especulación de la vivienda ha sido una práctica común en toda España en los últimos años. Sin embargo, fue aquí donde se prendió fuego a la mecha que ya anticipaba la futura quiebra de numerosas constructoras e inmobiliarias. La caída de las empresas Astroc y Llanera fue el pistoletazo de salida de la crisis de la vivienda.

En julio de 2007 el presidente de Astroc, Enric Bañuelos, dimitía de su cargo. La constructora de Morvedre acumulaba una caída sin fin en la bolsa, hasta el punto de que poco después saldría del IBEX 35. Un año antes Astroc tenía una increíble subida en bolsa que colocaba a Bañuelos como el tercer hombre más rico de España y el 95 del mundo, según la revista Forbes. Su fortuna personal sumaba 10.000 millones de dólares. Astroc era el icono de la burbuja inmobiliaria; una empresa que era como un globo; se hincha mucho pero está vacía por dentro.

En octubre de 2007 el grupo constructor e inmobiliario Llanera (de Xàtiva) entró en suspensión de pagos ante la imposibilidad de refinanciar a largo plazo su deuda de 746 millones de euros. Ferran Gallego, consejero delegado de Llanera, solicitó el concurso voluntario de acreedores. En años anteriores, Llanera había destacado por un frenético crecimiento empresarial. Así pues, la crisis de la vivienda que ha llevado a la quiebra a numerosas empresas tuvo su primer capítulo en Valencia, adelantándose un año a lo que después ocurriría en España.

S.O.S.: Apadrina a un constructor.

En los medios de comunicación españoles se habla a todas horas de lo mal que le va al sector de la construcción. De que todo está muy parado, de que no se venden pisos, de la pérdida económica, de que, pobrecitos empresarios, hay que ayudarles… ¡Es increíble! Y lo hacen como tratando de dar lástima a la gente. A mí no me dan ninguna lástima ni los promotores ni los constructores. ¿Ya nadie se acuerda de que durante un lustro el precio de la vivienda crecía un 20% anual y los sueldos el 2%? ¿O de cuando España -con 40 millones de habitantes- levantaba cada año tantas viviendas como Francia y Alemania juntas -con 140 millones de almas-? ¿Dónde está toda la pasta que han ganado en estos últimos años de vacas gordas? No creo que el dinero se haya esfumado como si nada.

A mí quien me da lástima realmente es todas esas parejas que han comprado por 240.000 euros un piso que realmente no vale más de 90.000. Todos esos matrimonios que han hipotecado sus vidas para los próximos 30 ó 50 años. Pero ¿sentir pena por los promotores y constructores? ¡Pero si son unos ladrones que solamente saben especular con el valor de la vivienda y vender mierda a precio de oro! Cuando el valor de los pisos subía un 20% anual y muchos nos quejábamos de que aquello era un abuso, ellos apelaban a la ley de la oferta y la demanda y aducían que era normal por la gran demanda. Ahora que nadie compra pisos, ningún promotor invoca dicha ley para bajar los precios y reactivar el consumo. No entra en sus planes vender a un precio razonable. Son unos buitres de rapiña.