El día de Pentecostés los apóstoles estaban unánimes juntos (Hechos 2:1) y de repente vino del cielo un estruendo como de un viento recio que soplaba, el cual llenó la casa donde estaban (Hechos 2:2) y a los apóstoles se les aparecieron lenguas de fuego sobre cada uno de ellos (Hechos 2:3). Todos fueron llenos del Espíritu Santo y comenzaron a hablar en lenguas según les daba el Espíritu que hablaran (Hechos 2:4). Lea entero el capítulo de Hechos 2. Es un texto impagable.
Debemos aclarar que dentro del don de lenguas lo hay de dos tipos: angélicas y humanas (1 Corintios 13:1). El don de lenguas angélicas, también llamadas extrañas (Hechos 14:4) o desconocidas (Hechos 14:14) se da cuando un cristiano habla en un idioma no humano que resulta desconocido incluso para él. Con él ora al Señor pero si no hay intérprete de lenguas ni siquiera él mismo sabe lo que dice (Hechos 14:13-17). Conviene pues que alguien con el don de interpretación, traduzca.
Pero también está el hablar en lenguas humanas. Esto consiste en que uno predica en su idioma pero las personas de alrededor lo escuchan cada una en su lengua natal. Esto es lo que ocurrió aquel día. Los apóstoles comenzaron a predicar y las gentes los oían cada uno en la lengua en que habían nacido. Es un hecho sobresaliente porque los discípulos eran israelíes y sin embargo, gracias al Espíritu, fueron entendidos por gentes de una veintena de naciones (Hechos 2:5-13).
El don de lenguas humanas ha sido altamente inusual a lo largo de la historia, pero los apóstoles no son los únicos que lo han tenido. Sant Vicent Ferrer, por ejemplo, fue un santo valenciano del siglo XV al que acompañaron los milagros. Uno de ellos era hacerse entender en otros idiomas, a pesar de que sólo hablaba valenciano y latín. Él predicó en valenciano por Europa y los naturales de cada país le entendían perfectamente como si les estuviera hablando en su propio idioma.
Quiero añadir que a menudo se produce una confusión entre don de lenguas y xenoglosia, que aun siendo parecidas, no son la misma cosa. Xenoglosia es la capacidad de una persona para hablar en un idioma que no conoce. Por ejemplo, que yo me ponga a hablar en chino sin saber nada de chino. Suele ser síntoma de una persona endemoniada. El don de lenguas, por el contrario, es que yo le predico en español a un chino y él me entiende en chino (pero yo le estoy hablando en español).
Abr 28, 2017 @ 13:14:41
Editamos el artículo:
Añadimos el último párrafo:
Quiero añadir que a menudo se produce una confusión entre don de lenguas y xenoglosia, que aun siendo parecidas, no son la misma cosa. Xenoglosia es la capacidad de una persona para hablar en un idioma que no conoce. Por ejemplo, que yo me ponga a hablar en chino sin saber nada de chino. Suele ser síntoma de una persona endemoniada. El don de lenguas, por el contrario, es que yo le predico en español a un chino y él me entiende en chino (pero yo le estoy hablando en español)
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Nov 10, 2020 @ 16:29:11
EXELENTE información totalmente de acuerdo.
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