El Santo Grial que usó Jesucristo en su Última Cena está en la Catedral de Valéncia. Aunque existen otros cálices que reclaman ser los verdaderos, carecen de pruebas que lo respalden. Así lo considera la mayoría de estudiosos y expertos. Además los papas Juan Pablo II y Benedicto XVI utilizaron el Grial al oficiar la misa en sus visitas al Cap i Casal.
¿Cómo es la copa? Hay dos elementos diferenciados como son una copa tallada en piedra de calcedonia, ágata o cornalina oriental, de siete centímetros de altura y nueve y medio de diámetro, que sería de la época de Jesús, y un pie de orfebrería con asas y piedras preciosas que es el relicario que se añadió en siglos posteriores para resaltar la pieza principal.
¿Y cómo llegó este cáliz a Valéncia? Según la tradición católica San Pedro lo llevó consigo a Roma, y allí permaneció hasta que el emperador romano Valeriano desató una persecución contra los cristianos. Entonces San Lorenzo envió el Cáliz en el siglo III a casa de sus padres en Huesca, custodiado por el soldado Precelio para salvarlo de ser destruido.
Los musulmanes invaden la Península Ibérica en el año 711 y a partir de 713 el Cáliz pasaría por recónditos lugares aragoneses: una cueva en Yesa, San Pedro de la Siresa, San Adrián de Sásabe, San Pedro de Bailío y otros lugares. El magnífico monasterio de San Juan de la Peña fue el último de estos escondites provisionales en el Reino de Aragón.
En 1399, por medio del Papa Luna, el Santo Cáliz pasó a manos del rey de Aragón y Valéncia Martín el Humano. El monarca lo custodió en el Palacio Real de la Aljafería de Zaragoza, y luego en el Real de Barcelona hasta su muerte en 1410. En 1424 su sucesor, el rey Alfonso el Magnánimo lo llevó consigo al Palacio del Real de Valéncia.
En 1437 Alfonso el Magnánimo entregó la reliquia al cabildo catedralicio en garantía de un préstamo de 40.000 ducados de oro que sirvieron para financiar sus conquistas en las ínsulas del Mediterráneo. Como fuera que este préstamo nunca fue devuelto por el monarca dicha reliquia quedó finalmente en propiedad de la Catedral de Valéncia.
En 1744 ocurrió un percance: al canónigo de la catedral Vicent Frígola al ir a sacar la sagrada forma del Santo Cáliz se le resbaló la copa y se rompió en varios pedazos. Aunque fue reparada de inmediato Frígola quedó tan afectado que murió en apenas quince días. Desde entonces el Santo Grial fue tratado y vigilado con un cuidado extremo.
Durante los siglos siguientes la sagrada copa fue guardada en el relicario de la Catedral, saliendo únicamente durante las invasiones napoleónicas rumbo a Alacant (L’Alacantí), Eivissa y Palma de Mallorca para ponerlo a salvo de las garras francesas. En el año 1916 se encontró su ubicación definitiva en la antigua Sala Capitular de la Catedral de Valéncia.
En 1936, en la Guerra Civil, pocas horas después de saquear y quemar la Catedral, el Cáliz fue escondido en el domicilio de Marina Sabina Suey en Valéncia. Josep Pellicer, al frente de una patrulla de anarquistas, lo encontró pero hizo la vista gorda. Luego el Cáliz fue a Carlet (La Ribera Alta). En 1939 se instaló en La Lonja y luego volvió a la Catedral.
Fuentes consultadas:
–La Historia del Santo Cáliz. Catedral de Valéncia (página web oficial). http://www.catedraldevalencia.es/el-santo-caliz_historia.php
–Domingo, Isabel. Un estudio de la UV concluye que el Santo Cáliz de Valencia es el auténtico. Las Provincias. 22-2-2019. https://www.lasprovincias.es/valencia-ciudad/investigacion-santo-caliz-valencia-autentico-20190222134722-nt.html
–Raga, Salvador. 101 hechos legendarios en la historia de Valencia. Vinatea Editorial. Catarroja, 2014.
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Josué Ferrer. 
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